CONSEJOS PARA ELEGIR EL SUJETADOR PERFECTO PARA TI
Si hay una prenda que nos acompaña a lo largo de toda nuestra vida y todas las horas el día …esa es el Sujetador.
Nuestro día a día está lleno de múltiples actividades que requieren diferentes tipos de sujeción y estilos, no es lo mismo estar sentada en una oficina o trabajar en una cadena, que cuando vamos a hacer deporte o nos vestimos para un evento.
Por otra parte los aspectos técnicos son muy importantes pero que me decís de los psicológicos…¿a quién no le pasa que al vestirse con un conjunto de lencería que le encanta, siente que le empodera y le da fuerza para comerse el mundo?
Pero bueno ….ahora vamos a centrarnos en los aspectos técnicos que son los que nos darán la sujeción y comodidad que buscamos.
Lo primero y más importante es llevar la talla correcta, por muy bonito o caro que sea, si no es la talla correcta acabará nuevo en el cajón.
Tiene que estar bien ajustado en el contorno, ahí está el 80% de la sujeción. Si al ponerte de perfil en el espejo la parte trasera del sujetador se sube hacía arriba y no está paralela al busto es porque llevas el contorno grande (número por el que pedimos la talla) el busto se ve caído.
Otro detalle son los tirantes, el 20% de la sujeción está ahí. Si se te caen o se te clavan haciendo un surco en los hombros, eso te indica que no está bien tallado.
La copa tiene que ser todo lo amplia que sea el busto. El aro tiene que llegar hasta debajo de la axila. Esa carne que a veces pensamos que es “chicha” es busto que no nos cabe en la copa. La letra que acompaña al número no es la correcta.
Las tallas de sujetadores van en contornos desde una 75 a 120, 130 (hablamos en tallas europeas) y en copas desde una A hasta K,L, M…
Con estas medidas, ¿Cómo no va a haber un sujetador perfecto para ti?
Cuando ya tenemos la talla y la copa podemos pasar a la forma que queremos darle al busto.
Para ello hay toda una variedad de patrones...sujetadores con pala lateral, si queremos centrar el busto hacia delante, preformados, para que no tengan costuras que se marquen pero tengan la misma consistencia que uno con costura ,spander que no tienen costura pero dejan el busto con forma más libre, con costura de “T” invertida y un largo etc.
Después de estos indicadores está claro que no tienes que ajustarte tú al sujetador sino que hay que encontrar uno que se ajuste a tus características y gustos, aquí es donde empieza el trabajo de una asesora en corsetería.
Entre esas más de 180 tallas diferentes ¿No vas a tener la tuya?
Nuestro cuerpo experimenta cambios a lo largo de las diferentes épocas de nuestra vida, (cambios de peso, cambios hormonales), por eso te recomendamos hacer una revisión de la talla cada 6 meses y recuerda…..
TU NO TIENES QUE ADAPTARTE AL SUJETADOR, Él SE TIENE QUE ADAPTAR A TI. HAY UN SUJETADOR PERFECTO PARA CADA MUJER Y CADA SITUACIÓN
NO TE CONFORMES CON MENOS.
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